A ultimos de este mes y principios de diciembre la Feria Internacional del Libro de Guadalajara llega como cada año. Junto con ella, las editoriales exponen sus novedades, así como el encuentro de escritores ( que por cierto sigo con la esperanza de algún día Isabel Allende me firme un ejemplar de la Casa de los Espiritus) en especifico, representantes del mundo literario del país invitado, que en esta ocasión fue la Ciudad de los Ángeles.
Nuestra Jornada comenzó a las 10 de la mañana, primeramente tomamos un desayuno consistente en baguette de jamón, selva negra,aceitunas negras, para mi madre y su nueva filosofia de comida con la menor cantdad de carbohidrtatos posible, y para su servidor,que despúes de mi reciente desilusion amorosa ( ojalá que a Mister "Chino" una vil plancha acabe con sus amados y atesorados caideles) ya la cuestión física no es tan importante,( aja,! si claro) decidi por unos huevos al gusto, y hot cakes con mantequilla, mermelada y miel.
Al términar mi orgiastico banquete de grasa y azucar, me dispuse a adentrarm a ese valle de letras protegidas por cubiertas de distintos significados; mi objetivo era hacerme de un ejemplar chick lit de Marian Keyes. Tras una larga y exsaustiva busqueda, y al ver mi reloj que ya eran las 2 de la tarde, me dí por vencido. Nada de la Keyes, más si muchos ejemplares de Carole Matews y Sarah Banks y su tan aclamada "Manual de Pesca para Chicas"( de la cual se baso la pélicula una Chica de los Suburbios protagonisada por Sarah Michelle Gellar) y Un lugar maravilloso, me disponia a la caja para pagarlos como paliativo a mi operacion fallida,cuando vi el precio que de verdad a mi parecer es una bofetada, 50 dolares, por cada ejemplar pueden creerlo???.
Cuando las bailarinas términaron con la coreografia, mi madre obvservó mi bolso, y tomo uno de los ejemplares que habia adquirido, me miró con esa dulzura y comprensión que solo las madres pueden ofrecer, y me dijo:
-"Espero que tu historia tenga un final feliz, con un chico que valga la pena",- a lo que simplemente respondí,conteniendo las lágrimas lo mas posible:
-Yo también madre, es mi esperanza-.
Saludos.